SALGÁN – SALGÁN
Horacio Adolfo Salgán y César Salgán

Hace unos días le contaba a César, que me había pasado casi toda la tarde escuchando grabaciones de la Orquesta de su padre, don Horacio Salgán, y viendo videos de sus diferentes actuaciones, incluyendo las del “Teatro Colón” –con una gran orquesta- en el año 1972.

El video del concierto en el “Colón” muestra al maestro en el piano, seis bandoneones, y una cantidad increíble de cuerdas, incluyendo violines, violas, chelos y bajos. La interpretación es espectacular y el sonido es realmente extraordinario, te pone “los pelos de punta”, diría mi viejo!…

Entonces volví a leer minuciosamente la historia de don Horacio en cuanto medio estuvo a mi alcance y sería extenso hacer mención de su carrera artística. Imagínense que a los seis años comienza a estudiar piano y a los trece ya ejecuta a Chopin, Beethoven, Debusy y Ravel. Ya era el mejor alumno del Conservatorio.

De ahí en más comienza la etapa más importante de su vida… que dura más de ochenta años!… En 1930 actuaba en los matinés del cine de su barrio, acompañando películas y en el ’34 comienza como solista en Radio Belgrano.

Horacio Salgan en 1938

Con solamente 20 años, (1936) se convierte en pianista de la orquesta del maestro Roberto Firpo. Para entonces, (Nov. 05, 1931) ya Firpo había grabado el fox-trot de mi viejo, “Amor Imperial”, del cual en aquellos años la “Editorial Schneider” realizó siete ediciones.

Ubicado junto a Astor Piazzolla como gestores del “tango de vanguardia”, don Horacio y su orquesta, logró posicionarse como la más importante en su género, con la participación de las voces más destacadas de aquellos años, Edmundo Rivero, el “Polaco” Roberto Goyeneche y Horacio Deval.

Para resumir sobre la vida artística de Horacio Salgán, solamente debo decir que, durante su carrera musical, escribió e incluso realizó arreglos, de más de 400 obras.

“De tal palo, tal astilla”

Le contaba a César que me emocionaba el hecho de que, salvando las distancias, me sucedía lo mismo que a él, con mi padre. Él sentado en el piano, con las partituras abiertas en la mesa del comedor y escribiendo un arreglo para la orquesta. Y yo sentado a su lado escuchando y observando. Al repasarlo, me preguntaba si me gustaban aquellos compases y juntos volvíamos a escucharlo por si quería cambiar algo.

César estudió el contrabajo en el “Conservatorio Gilardo Gilardi” de La Plata, Ciudad donde nació. Eran ocho horas cada día, pero como era obligatorio estudiar un instrumento armónico, entre la guitarra o el piano, se decidió y descubrió que el piano le brindaba la opción de ejecutar y escuchar la obra completa. Y desde entonces comienza sus estudios y crece rápidamente como intérprete de nuestro “tango de vanguardia”.

El 6 de marzo del 2004, debuta en dúo con Ubaldo de Lío, en el “Club del Vino” y realiza la nueva formación del “Quinteto Real”, por el cual ya habían pasado grandes figuras, como Antonio Agri y Leopoldo Federico.

El Quinteto Real

Celoso de la obra de su padre, se convierte en custodio de ella, tomando en el año 2008 la dirección de la Orquesta, teniendo bajo su control las tres formaciones que tenía don Horacio: el dúo Salgán-De Lío, el “Quinteto Real” y la Orquesta.

Es una reminiscencia de nuestra actitud con respecto a la carrera de nuestro padre, puesto que mis hijos y yo, en nuestra página (www.tangosalaclub.com.ar) expresamos que somos los “custodios de la obra del maestro José Sala”.

Me complace transcribir parte de la excelente entrevista realizada para el Diario “El Clarín” por Sandra de la Fuente (10 Julio, 2017):

“No me animaba tocar para mi padre”
Sandra:
-¿Cómo fue que teniendo tanto miedo de tocar el piano delante de él
(don Horacio), te pusiste al frente del Quinteto?

César:
-Primero me llamó Ubaldo para que tocara con él; Yo había tocado el bajo
eléctrico en el “Quinteto Real”. Soy contrabajista, pero el contrabajo no funciona
con mi carácter. Después de estudiar ocho horas tenía que salir a tocar, a
socializar. No me gustaba. Un día probé estudiar una hora de piano. Me gustó
eso de que la música sonara completa. Así que, de a poco, fui dejando de
dedicarle las ocho horas al bajo y pasé al piano. Ubaldo (de Lío) supo de eso y
me llamó para que tocara con él. Así empezó el asunto. Un día me llamaron
para grabar un disco con tres temas míos. Cuando terminó la grabación,
apareció la oferta de un disco solista. Ahí fue que me dije que tenía que buscar
los arreglos de mi padre. Los saqué de oído. Me enloquecieron al punto de que
decidí no escribir hasta no estar a la altura. No es que pretendiera tener la misma
calidad sino que buscaba sentir el placer que sentía al tocar los tangos de mi
papá.
Durante mucho tiempo no disfruté del escenario, pero cuando mi papá dejó de
tocar y lo reemplacé, la gente se me acercaba para expresarme el cariño que
sentía por él. Para mi era una alegría a la casa y contarle las cosas lindas que me
decían. Ese cariño hizo que empezara a disfrutar muchísimo.”

Como bajista formó parte de grupos de diversos géneros, “pop”. música latina, “jazz”, hasta que en 1976 integró la orquesta de su padre. Y luego de 27 años como bajista, dedicó todo su empeño a ejecutar el piano.

Los días 29 y 30 de Julio del 2016, se presentó en el Teatro Colón de Buenos Aires con el “Quinteto Real”, con motivo del Centenario de su padre, don Horacio Salgán.

Su notable carrera artística como bajista y pianista, compositor, y arreglador lo coloca entre los más importantes músicos de nuestra música popular, el tango de vanguardia, que supo representar en giras internacionales por Uruguay, Bolivia, Brasil, Paraguay, Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Europa y Oriente.

Recuerdo que César comentó que durante su presentación en Japón el público aplaudía… e inmediatamente entonaban canciones tradicionales de su país como una especie de ofrenda a la actuación que él había realizado. Y otra hecho que me quedó grabada son los comentarios de la gente con respecto a su padre, la felicidad que le causaba y la alegría con la que él le narraba a don Horacio los comentarios recibidos.

Basta ver la película, “Salgán & Salgán” realizada por Carolina Neal, para conocer profundamente la vida de estos brillantes artistas argentinos. Como una nota especial, debo mencionar que Guillermo, a quién don Horacio dedicara su tango “Grillito” y hermano de César, fue Timbal solista y Director Adjunto de la Orquesta Sinfónica de la ciudad de Bahía Blanca.

Tengo la música, los tangos y arreglos de Salgán & Salgán en mi cabeza, los estoy escuchando permanentemente y disfruto tarareando cada compás de cada tema.

Gracias César, por tu amabilidad, tu cordialidad y sobre todo, por continuar con la obra magistral de tu padre y… por tu extraordinario talento en creatividad, armonía, ritmo… en fin, tu musicalización de aquellos tangos de antes y de tu pura e imaginativa inspiración.

Hasta la próxima, amigos!

José Osvaldo “Cacho” Sala
Margate, FL, USA
Febrero 1, 2022