“La llovizna pega en el cristal de aquel ventanal de su cuarto de soltera… mientras ella lee aquel novelón sentimental!…” Si, “Nunca tuvo novio”, de Agustín Bardi en la música con los versos de Enrique Cadícamo. Aquellos magníficos versos de Cadícamo fueron interpretados, como muchos otros, escritos con diferentes compositores, por infinidad de artistas, cantantes y perduran a través de los años. “Soñás un paisaje de amor!”

Y ni que hablar de José María Contursi, “Tú…con la magia de tu amor y tu bondad…Tú…me
enseñaste a soreir y a perdonar… Se refería sin lugar a dudas al amor de su vida, Susana Grisel, la niña de la cual se enamoró locamente y fue la inspiración más grande de su vida literaria. De él nacieron “Cristal”, “Quiero verte una vez más”, “Como dos extraños”, “Grisel”… y muchos más que se hicieron éxitos en las voces de reconocidos intérpretes.

¡Ves…
yo era un grito de rencor
en el trágico final
de mi desesperación!
Ves…
todo aquello se esfumó
como brumas en el mar
al llegar la luz del sol…
Tú…
milagrosa musiquita de cristal…
Tú…
me enseñaste a sonreír y a perdonar!…

José María Contursi, nació en Lanús, Buenos Aires el 31 de Octubre de 1911. Hijo de prolífero escritor Pascual Contursi, mientras que su padre escribía en un ambiente vulgar, trasnochado en las noches de bohemía en París, José María heredó la creatividad de sus palabras precisas en los versos románticos que escribía en su juventud.

El romántico encuentro fue cuando Grisel tenía tan solo 16 años, y esa relación apasionada que los envolvió tan románticamente, tuvo un desencuentro cuando José María decidió volver con su esposa. Grisel también se casó. Cuando por fin ambos quedaron libres nuevamente, un amigo intentó un re-encuentro que terminó con un feliz desenlace. Se casaron, felizmente y cumplieron su sueño truncado.

Seguramente habrán leído o pueden hacerlo en una nota que publiqué en “tangosalaclub” titulada “Los Contursi”, en la que amplío mucho más sobre la historia de estos escritores.

José María Contursi, conocido momo “Katunga”, falleció el 11 de Mayo de 1972. Tenía tan solo 61años.

Como un recuerdo especial al amor de su vida, transcribo los versos de su tango “Cristal”,
musicalizado por el grandioso Mariano Mores:

Tengo el corazón hecho pedazos,
rota mi emoción en este día…
Noches y más noches sin descanso
y esta desazón del alma mía…
¡Cuántos, cuántos años han pasado,
grises mis cabellos y mi vida!
Loco… casi muerto… destrozado,
con mi espíritu amarrado
a nuestra juventud.

Más frágil que el cristal
fue mi amor
junto a ti…
Cristal tu corazón, tu mirar, tu reír…
Tus sueños y mi voz
y nuestra timidez
temblando suavemente en tu balcón…
Y ahora sólo se
que todo se perdió
la tarde de mi ausencia.
Ya nunca volveré, lo se, lo se bien, ¡nunca más!
Tal vez me esperarás, junto a Dios, ¡más allá!

Todo para mi se ha terminado,
todo para mi se torna olvido.
¡Trágica enseñanza me dejaron
esas horas negras que he vivido!
¡Cuántos, cuántos años han pasado,
grises mis cabellos y mi vida!
Solo, siempre solo y olvidado,
con mi espíritu amarrado
a nuestra juventud…

Hasta la próxima, amigos…

José Osvaldo “Cacho” Sala Botello
Mayo 15, 2023
Margate, FL USA